El Laboratorio de Biología de la Conservación de la Red Ambiente y Sustentabilidad del Instituto de Ecología INECOL ubicado en Xalapa, Veracruz, ha desarrollado investigación participativa desde principios de los años 2000 sobre las palmas patas de elefante del género Beaucarnea. Estas plantas son propias de las selvas secas y semidesiertos de México principalmente. Naturalmente no se encuentran en ninguna otra región del planeta, y por eso son consideradas endémicas a nuestro país. 

Las palmas patas de elefante, también conocidas como soyates, palmas monja o despeinadas son plantas que pueden alcanzar tallas superiores a los 15 metros de altura y sus bases globosas varios metros de circunferencia, sin embargo consideramos que en su hábitat natural tardan cientos de años en crecer de esta forma. Las plantas germinan de semillas que apenas pesan un gramo, las semillas tienen alta viabilidad pero en las poblaciones naturales muy pocas plántulas o juveniles llegarán a ser plantas adultas de gran talla. 

El equipo del Laboratorio de Biología de la Conservación del INECOL junto con otras instituciones de investigación como la Universidad Autónoma de Querétaro y el Centro de Investigaciones Científicas de Yucatán CICY formaron con financiamiento del Sistema Nacional de Recursos Fitogenéticos para la Alimentación y la Agricultura (SINAREFI) una red de investigación nacional desde el año 2008: la Red Pata de Elefante. 

La Red impulsa paralelamente investigación botánica para conocer más sobre la biología y ecología de estos gigantes nativos de México pero también el aprovechamiento regulado de esta planta ornamental. En 2004 el Laboratorio de Biología de la Conservación del INECOL coordinó técnicamente a ejidatarios de la región central de Veracruz para que se organizaran y conformaran una unidad de manejo para la conservación de vida silvestre (UMA) especializada en patas de elefante. La investigación realizada por los especialistas permitió desarrollar un plan de aprovechamiento de semillas de B. recurvata, la palma presente en los predios de los campesinos interesados en emprender como productores de palmas. Los campesinos acordaron usar el treinta por ciento de las plantas producidas para repoblar sus predios de selvas bajas como un compromiso con la permanencia de esta especie en su hábitat natural. 

En la actualidad, las patas de elefante están en muchas casas mexicanas, son plantas muy apreciadas por viveristas y aficionados a las plantas. Las plantas se germinan en viveros de gran escala en los principales centros viveristas de nuestro país de los estados de Morelos y Colima. Sin embargo, una evaluación reciente del estado de conservación de las patas de elefante coordinado por la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO) sugiere que las palmas B. recurvata se encuentran en peligro de extinción. Es por ello que derivado del trabajo conjunto de la Dirección General de Vida Silvestre de SEMARNAT, la CONABIO y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente como autoridades representantes de México ante la CITES, nuestro país ha obtenido respaldo internacional para continuar con la conservación de estas plantas únicas de México que se encuentran amenazadas principalmente por la pérdida y transformación de su hábitat, así como por la extracción y comercialización ilegal de ejemplares y semillas fuera de sus áreas de distribución. 

 

 

* Maestro en Ecología Aplicada, forma parte del equipo del Laboratorio de Biología de la Conservación de la red Ambiente y Sustentabilidad en INECOL.