¿Porqué conservar la biodiversidad?

Paulo Haro, Keisy Parra Henao, Karen Rojas Herrera, Juan Carlos Serio Silva

 Año 2019 y aún no lo queremos gritar muy alto e inclusive, muchos -desde los gobiernos hasta en la sociedad civil- hacemos como si no fuera real, pero créanlo está pasando y sin duda la estamos agotando. Estamos hablando de la Biodiversidad; esa que constituye nuestro entorno y que estamos destruyendo. Que seguimos sin valorar y que a pesar de las presiones que tiene, aun nos provee un incontable número recursos y servicios que creemos que podemos explotar indiscriminadamente sin asumir que nos podremos pronto llevar una sorpresa.

Hoy en día enfrentamos un momento decisivo para el futuro de la vida en la tierra como la conocemos, afuera de las ciudades vemos cómo las especies y los ecosistemas comienzan a extinguirse en nuestras manos; de vez en cuanto nos damos cuenta de un futuro, cada vez más cercano, donde las futuras generaciones no podrán conocer ni disfrutar todo lo que nosotros tuvimos la fortuna de conocer. Han pensado alguna vez en cuál será su respuesta cuando sus nietos se acerquen a preguntarles ¿cómo se veían los murciélagos, qué comían, dónde vivían?, ¿había flores de muchos colores y diferentes tipos de frutos?, ¿en realidad existían animales fantásticos como las tortugas? Ahora parece ser irreal que formas de vida tan extraordinarias que han compartido la tierra con nosotros y que son producto de millones de años de evolución puedan desaparecer y vayan a permanecer sólo mediante fotos, dibujos, libros y colecciones. ¿Ranas y sapos cantaban por las noches?, ¿aves que cruzaban el firmamento por miles de kilómetros?, ¿monos que saltaban entre las copas de los árboles por horas? Debió haber sido maravilloso, pensarán. Pronto sólo quedará el ruido y las luces de las ciudades.

Pero no todo está perdido, es momento de actuar y hay muchas personas que dedican su vida a proteger lo que nos queda e intentar mejorarlo, existen investigadores, técnicos académicos y estudiantes de posgrado del Instituto de Ecología AC (INECOL) de Xalapa, Veracruz, quien también creen que es momento de que todos actuemos, porque si no eres parte de la solución, entonces eres parte del problema, un problema que nos incluye a todos. Desde nuestro diario vivir podemos proponer soluciones y adoptar nuevos comportamientos que, por más pequeños que parezcan, son el punto de partida de una conciencia comunitaria; todo esto bajo la premisa de “debemos pensar globalmente y actuar localmente”, es así que empecemos con un pequeño paso y después intentemos dar uno más grande. Hoy todos quienes leen estas líneas están siendo invitados a unirte a esta lucha, reconociendo que es una realidad y que el cambio está en nuestras manos y como muchos que ya lo han decidido, entre gobiernos, sociedad civil y académicos, debemos elegir que aún hay esperanza, pero no nos debemos quedar ahí ¡tenemos que actuar!, unamos esfuerzos y generemos juntos un gran impacto.

¡Generemos conciencia!, entendamos, valoremos y cuidemos la naturaleza; compartamos nuestros conocimiento con los demás. Dejemos de visualizar los ecosistemas y los recursos de la naturaleza como algo ajeno a nosotros, comprendamos que tampoco es necesario agotar estos recursos justificándonos en nuestras necesidades, escuchemos las distintas perspectivas y conservemos desde cada una de ellas. Entendamos que somos la causa y la única solución, como individuos y como sociedad, midamos el impacto que generamos y hagamos conciencia hoy que aún estamos a tiempo. No esperemos hasta que sea demasiado tarde.