¿Cómo sudan las plantas?

Klaus Mehltreter

Durante el día, las plantas pierden mucha agua en forma de vapor porque sus hojas tienen que abrir sus poros para absorber dióxido de carbono y liberar oxígeno. Sin embargo, este “sudor” también enfría las hojas y evita que se sobrecalientan. De noche, algunas plantas sudan gotas de agua para mantener el flujo de agua en su organismo y para absorber por medio de sus raíces a los nutrientes disueltos en el agua del suelo.

En un día caluroso, nosotros sudamos. Cuando llega una brisa ligera, el sudor se evapora, y nos da la sensación agradable de enfriamiento. ¿Y cómo evitan las hojas de las plantas de sobrecalentarse? ¿Las has visto sudar? Las plantas también sudan, solo que liberan normalmente el agua en forma de vapor invisible. De este modo, no se puede ver tan fácilmente como las gotas de sudor sobre nuestra piel. Sin embargo, en una fresca mañana, se puede observar cómo encima de las copas de los árboles se forman nubes que ascienden (Fig. 1). Estas nubes se forman en gran parte por el vapor de agua que las hojas liberan. Así es que el sudor de los bosques forma parte de las lluvias que caen en el interior del país. Por esta misma razón, la tala de árboles puede causar una disminución de las lluvias.

En un día caluroso, un árbol grande transpira más de 100 litros diarios, mucho más de lo necesario para mantener sus hojas a temperaturas que no son dañinos. En realidad, las plantas abren sus poros, las estomas, en la superficie inferior de las hojas para absorber el gas de dióxido de carbono (= CO2) que es esencial para convertir la energía lumínica de la radiación solar en energía química en forma de azúcares, un proceso llamado fotosíntesis. Como solo 0.04% del aire consiste en CO2, las hojas pueden tener cientos de poros por cada milímetro cuadrado de su superficie inferior. Durante el día estos poros son abiertos para capturar CO2 y liberar oxigeno (O2) a costo de una gran pérdida de agua. El oxígeno es un producto de esa misma fotosíntesis y valioso para nosotros porque lo necesitamos para respirar. Esto significa que las plantas no evaporan tanta agua para enfriarse sino para absorber CO2 requerido para su crecimiento y para liberar O2.

Sin embargo, durante la noche las estomas están cerradas, y solo algunas plantas empiezan liberar agua en forma de gotas, un proceso que se llama gutación. Estas plantas absorben agua con sus raíces durante la noche con el propósito de conseguir más nutrientes disueltas en el agua del suelo. Las gotas de agua se pueden observar del lado superior (Fig. 2) o en los márgenes de las hojas (por ejemplo, en las hojas de fresas), siempre cuando la humedad del aire es alta para que no evaporen de manera inmediata. No hay que confundir la gutación de las plantas con la escarcha, la condensación de agua del aire, cuando esta es saturada de humedad. ¿Pero cómo se puede saber si el agua provino del interior de la planta o del aire saturada de humedad? Si el agua fue liberada por la planta, el líquido lleva sales disueltas que se secan en la superficie de la hoja y se aprecian como puntos blancos (Fig. 3).

 

Pies de foto

Fig. 1. La niebla ascendente en una fresca mañana proviene en gran parte del “sudor” de las plantas, el vapor de agua que están transpirando (Foto: K. Mehltreter).

Fig. 2. (slider) Las gotas sobre estas hojas fueron liberados de noche para que la planta puede absorber al mismo tiempo con sus raíces agua del suelo con nutrientes valiosos. (Foto: K. Mehltreter)

Fig. 3. Los residuos de sales que se secaron en la superficie de la hoja de un helecho se aprecian como puntos blancos (Foto: K. Mehltreter).